Afganistán, una guerra imposible de ganar


Muchas cosas han pasado desde que la ‘Operación Libertad Duradera’ iniciara su incursión contra el llamado ‘frente central’ del terror. Para empezar, ocho años, miles de millones de dólares en inversión, 68.000 soldados desplazados y hasta un nuevo presidente en EE.UU. más dispuesto al diálogo que a la confrontación. Pero hay algunas cosas que no cambian: Afganistán es una de ellas. Este país que fue llamado el Vietnam de la URSS, va camino de convertirse en el Vietnam de Obama.

¿El Vietnam de Barack Obama?

La historia no ha dado un respiro al pueblo afgano. Desde 1839, Afganistán ha pasado de ser una monarquía feudal a una dictadura comunista; ha sufrido tres guerras anglo-afganas, una invasión soviética, una guerra civil, una dictadura teocrática talibán que convirtió al país en un refugio de Al Qaeda y una invasión occidental a través de la llamada ‘Operación Libertad Duradera’. En tres meses, los talibán fueron aparentemente derrotados sin esfuerzos por la coalición -que sufrió tan sólo 69 bajas- y sustituidos en el Ejecutivo por un de sobra conocido Hamid Karzai, que fue impuesto por EE.UU. Leer el artículo completo.